Texto: Hebreos 4:14-5:10
14Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los
cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión.
15Porque no tenemos un sumo sacerdote que no
pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo
según nuestra semejanza, pero sin pecado.
16Acerquémonos,
pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y
hallar gracia para el oportuno socorro.
1Porque
todo sumo sacerdote tomado de entre los hombres es constituido a favor
de los hombres en lo que a Dios se refiere, para que presente ofrendas y
sacrificios por los pecados;
2para que se muestre paciente
con los ignorantes y extraviados, puesto que él también está rodeado de
debilidad;
3y por causa de ella debe
ofrecer por los pecados, tanto por sí mismo como también por el pueblo.
4Y nadie toma para sí esta
honra, sino el que es llamado por Dios, como lo fue Aarón. 5Así tampoco Cristo se glorificó a sí mismo haciéndose
sumo sacerdote, sino el que le dijo: Tú
eres mi Hijo, Yo te he engendrado hoy. 6Como
también dice en otro lugar: Tú eres
sacerdote para siempre, Según el orden de Melquisedec.
7Y Cristo, en los días de su
carne, ofreciendo ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas al que le podía
librar de la muerte, fue oído a causa de su temor reverente.
8Y aunque era Hijo, por lo
que padeció aprendió la obediencia; 9y habiendo sido
perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le
obedecen;
10y fue declarado
por Dios sumo sacerdote según el orden de Melquisedec.
Introducción
El
escrito de la epístola, traslada su argumentación del día de reposo, para
exponer la necesidad de una verdadera espiritualidad bíblica, que no esté
centrada en las prácticas religiosas del sistema sacerdotal aarónico. Aquí
expone que Cristo es mayor que todo Sumo Sacerdote y el sistema sacerdotal. Es
una explicación de cómo debemos interpretar todo ese sistema
antiguotestamentario, a la luz de la vida y obra de Cristo Jesús.
Por
cierto, aquí hay una extraordinaria explicación de lo que es la espiritualidad
bíblica. Algo de lo que debemos estar atentos, para practicar y vivir.
Expondremos
una primera parte, lo que sería una descripción de la Espiritualidad Bíblica
desde el texto de Hebreos 4:14-16. Luego, daremos las razones de por qué Jesús
es el único que nos puede acercar al trono de Dios, en Hebreos 5:1-10.
1) Espiritualidad
Bíblica (4:14-16)
Estos
versículos nos dan una pista de nuestro peregrinaje espiritual, nos indican
cómo debemos vivir la espiritualidad genuina.
a) ¿Cómo describe la
Espiritualidad Bíblica? La describe en estos
términos: “Acercarse confiadamente al trono de la gracia”. No tenga temor ni
miedo, de Dios. No pongan excusas, para no acercarse. Todo lo contrario,
acérquense con confianza, las puertas de la presencia de Dios, están abiertas
para todo aquel que quiera acudir con corazón humilde y arrepentido. El trono
de la gracia está accesible, a todos por medio de la obra de Cristo Jesús.
b) ¿Cómo puedo acceder a
esta Espiritualidad Bíblica? La única forma, el
único camino, es a través de Jesucristo. Él abrió el camino al trono de la
gracia, porque traspasó los cielos, para que tengamos acceso a la presencia de
Dios. Eso es posible, porque Él sabe muy bien nuestra condición como seres
humanos; Él se identificó con nuestras debilidades, tentaciones y flaquezas, al
encarnarse y sufrir todo lo que nosotros sufrimos. Incluso, Él fue tentado en
todo, pero no sucumbió.
Por eso, Él es el único que, al
compartir la naturaleza humana y divina, nos puede unir, comprendiendo
perfectamente, cada una de las realidades a unir: cielo y tierra.
c) ¿Cuál es el resultado
de la Espiritualidad Bíblica? Pueden expresarse muchas respuestas y
consecuencias, de vivir la Espiritualidad Bíblica; pero, el texto expresa dos
que son la base de nuestra vida cristiana: Alcanzar la misericordia de Dios y ayuda
de la gracia para el momento oportuno. ¿Cómo podemos vivir en este mundo, tan
alejado de Dios, sin la misericordia y la ayuda divina? ¿Cómo enfrentar los
retos, los problemas, el sufrimiento, las tentaciones, los fracasos, los éxitos
y demás circunstancias, sin la misericordia y la gracia de Dios?
La verdadera Espiritualidad Bíblica me
lleva a buscar la misericordia y la gracia de Dios; lo demás, es secundario a
esto.
2) Jesús, nos acerca al
Trono de Dios (5:1-10)
Teniendo
claro lo que es la Espiritualidad Bíblica, el autor de la epístola, dedica
tiempo a explicar cómo Jesús, en su oficio como Sacerdote, es el designado por
Dios para ser Sumo Sacerdote, nuestro mediador.
Cabe
preguntarnos: ¿Cómo ejecuta Cristo el oficio de sacerdote? Cristo ejecuta el
oficio de sacerdote al haberse ofrecido a sí mismo a Dios, una sola vez, como
un sacrificio sin mancha, para ser la reconciliación por los pecados de su
pueblo, y al hacer continua intercesión por ellos (Catecismo Mayor de
Westminster, pregunta y respuesta 44).
Si
Jesús es nuestro sacerdote o mediador entre Dios y nosotros, ¿por qué Jesús es
el único que nos puede acercar al trono de Dios, como una expresión verdadera
de espiritualidad cristiana?
a) Jesús es el mediador
entre Dios y nosotros (vv.1, 10)
El
sacerdocio aarónico, era deficiente en muchas formas y con el tiempo se corrompió.
Ellos debían presentar ofrendas por sus hermanos. Ellos mismos, fueron
escogidos por Dios, para hacer esta función. Aquí es Dios mismo quien declara a
Jesús Sumo Sacerdote, no según el orden de Aarón, sino según el Orden de
Melquisedec, un linaje sacerdotal más antiguo y de mayor relevancia, para las
edades de la fe cristiana.
¿Por qué Jesús es el
único que nos puede acercar al trono de Dios, como una expresión verdadera de
espiritualidad cristiana? Porque Jesús es el
único medidor designado por Dios, para estar entre Él y nosotros. Por eso,
debes acudir a Cristo en todo momento.
b) Jesús se identifica
con nuestras debilidades humanas (vv. 2, 8-9)
Esta
es la razón por la que Cristo se encarnó, “para mostrarse paciente con los
ignorantes y extraviados, para estar rodeado de debilidad”. Él (Jesús) padeció
mucho y vivió en obediencia a Dios, hasta las últimas consecuencias.
“Aunque él era Hijo
de Dios, por medio del sufrimiento aprendió lo que significa obedecer siempre a
Dios” (v. 8 TLA). Si Jesús, siendo el Hijo de Dios
tiene que obedecer y sufrió, por causa de seguir la voluntad de Dios, ¿por qué
será diferente con nosotros? Una verdadera espiritualidad bíblica, implica
obediencia a la Palabra de Dios y sufrir por ajustarnos a Su voluntad perfecta.
La
frase, en RVR 60: “habiendo sido perfeccionado”, en el versículo 9, proviene de
una palabra en griego teleioo (τελειόω, G5048),
relacionado con el adjetivo teleios completo, perfecto, y con el Nº 1, denota
llevar a un fin en el sentido de completar o perfeccionar, y se traduce
«termino mi obra» (Luc_13:32; VM: «el tercer día soy hecho perfecto»). Por lo
que se puede traducir como “y terminado su obra, vino a ser autor de eterna
salvación…” Esto lo logró, debido a lo expresado en el versículo 8, la
obediencia a Dios.
¿Por qué Jesús es el
único que nos puede acercar al trono de Dios, como una expresión verdadera de
espiritualidad cristiana? Porque Jesús conoce
perfectamente nuestra realidad, de pecado, debilidades y flaquezas, para así
llevarnos a Dios a través de la obediencia de Su Palabra y el enfrentar todo
por ajustarnos a Su Voluntad Eterna.
Si
Jesús logró terminar su obra, en favor nuestro, ¿por qué vas a dudar en que Él
que comenzó la buena obra, no la va a terminar? Tu crecimiento espiritual,
deben de la gracia de Dios; solo debes buscar obedecer la Palabra y seguir a
Jesús. Cristo, mediante sus sufrimientos, nos enseñó hasta donde debemos
someternos a Dios y obedecerlo (Juan Calvino).
c) Jesús intercede ante
Dios, por nosotros (vv. 3, 7)
Una
de las funciones sacerdotales era ser el intercesor entre el pueblo y Dios. Esa
misma función la tiene Cristo Jesús; quien, debido a tiempo en medio de la
encarnación, ofreció ruegos y súplicas a Dios, por nosotros. Y ahora, sigue
haciendo lo mismo delante del trono de Dios.
¿Por qué Jesús es el
único que nos puede acercar al trono de Dios, como una expresión verdadera de
espiritualidad cristiana? Porque Él está en el
trono de Dios, intercediendo por nosotros (Romanos 8:34; Hebreos 7:25). Una
espiritualidad genuina te lleva a Cristo, para que Él interceda por ti, delante
del trono de Dios.
d) Jesús es el Sumo
Sacerdote, designado por Dios (vv. 4-6)
El llamado a
ser Sumo Sacerdote, fue dedicación de Dios. Fue Él quien designó al linaje de
Aarón, para este encargo. Igual ocurrió con Jesús, fue Dios mismo quien los
llamó, y designó como Sumo Sacerdote. Esa fue su misión y llamado divino.
¿Por qué Jesús es el único que nos puede acercar al
trono de Dios, como una expresión verdadera de espiritualidad cristiana?
Porque fue llamado y designado por Dios, para ser nuestro Sumo Sacerdote, el
único que nos puede llevar a una relación con Dios el Padre. Si Jesús es el
único camino, la única verdad y el único que da vida eterna, ¿por qué no vamos
tras sus huellas? ¿Por qué lo evadimos y nos apartamos de Su camino, por qué
dejamos de aceptar Su verdad y por qué no reconocemos nuestra necesidad de Su
vida eterna?
Conclusión
El
llamado es a acercarse al trono de la gracia. Ven a Jesús. Deja de estar
jugando a la religión y toma en serio el llamado de Dios, de vivir como
discípulo de Cristo, y creciendo en una verdadera espiritualidad bíblica.